Hay veces que sientes que te supera la vida……. Crees que no puedes resolver todo lo que te está cayendo encima, te pesa todo, se te cierra el estomago……. te angustia.
Angustia viene de angosto, cuando sentimos angustia estamos reprimiendo una emoción que creemos no poder controlar. Estamos estrechando la salida del sentimiento que empuja para afuera. A veces son enfados, a veces son tristezas, a veces son miedos….
Para aliviar la angustia lo mejor es respirar hondo y tratar de tomar contacto con eso que estoy encerrando …. Sea lo que sea se puede sentir sin mas. Se deja salir y ya está, si toca llorar se llora y si toca reír se ríe. Ponle nombre y déjalo estar. Puede ser que solo con eso pierda todo su poder.
Pero como la angustia vuelve, la verdadera carrera de fondo es confiar. Puedes confiar en personas, pero muchas veces eso no sirve, no les quieres cargar con tu peso o no encuentras las personas adecuadas. Solo te queda confiar en ti. Funciona ser realista (sin negar, sin evitar), y optimista. Optimista no es ser un flipado, optimista es querer y poner empeño en resolver las cosas.
La vida es como es. Nosotros podemos intentar escapar de ella o vivirla tal como viene. Si tratamos de escapar estaremos corriendo siempre y la vida nos perseguirá. Viviremos con mucho peso, cada año un poquito más de peso.
Si decidimos vivirla nos cansaremos cuando sea cansina pero también tendremos la oportunidad de sacar lo mejor de ella y puede que lleguemos a vivirla a tope. Suena bien, y es fácil mantener esta decisión cuando viene lo bueno, el momento disfrutón. Pero cuando viene lo malo no. Por eso hay que confiar….. No todo tiene que tener sentido pero sí puede servir para algo. Se trata de buscarlo.
1 comentario
Cristina Villacieros · septiembre 7, 2017 a las 11:58 am
Que me encantaaaaaaa pichonaa. Lo q vale ella!